Acaba de terminar la final de la Liga de Campeones disputada en el Allianz Arena
de Múnich ante 62.500 espectadores. El Bayer cayó en los penaltis. El silencio del público hacía más elocuente el dolor de los derrotados. El equipo vencedor ha sido el Chelsea inglés. El ídolo del equipo Drogba metíó el gol que llevó a su equipo a la tanda de penaltis. Tras meter el gol, se santigua y señala el cielo en gesto agradecido. Estos gestos los repitió cuando marcó el último penalti que le dió el triunfo a su equipo.
Hemos podido ver también a otro jugador del Chelsea, que en el momento de recoger la copa de campeones, llevaba una camiseta blanca con la leyenda "Promesa de Dios"
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