VIERNES SANTO. Adoración de la Cruz

Viernes Santo. Jesús muere en la Cruz. El instrumento  de tortura y dolor se transforma en el más grande gesto de amor. La cruz no es un madero, en ella está clavado Jesús y su sangre derramada nos da vida. Por eso los cristianos adoramos la Cruz. 

 En los oficios de este día, el sacerdote, con ornamentos rojos (el rojo es el color litúrgico que se utiliza para celebrar las fiestas de los mártires) muestra la cruz para ser adorada. Dice las palabras "mirad el árbol de la cruz donde estuvo clavada la salvación del mundo" los fieles responden "Venid a adorarlo". Por último hay dos gestos de adoración de la Cruz: con la genuflexión ante ella o con un beso.

•  "No hay mayor amor que dar la vida por los amigos”. (Jn 15,13)
•  "Pues bien, Dios nos demostró su amor en que, siendo aún pecadores, el Mesías murió por nosotros." (Rm 5, 8)
• "Hemos conocido lo que es el amor en aquel que dio la vida por nosotros. Así, pues, también nosotros debemos dar la vida por los hermanos." (1Jn 3, 16)

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